Personal de Golder, procedente de seis países, contribuyó al diseño del depósito de relaves para el proyecto Quebrada Blanca Fase 2 (QB2) de Teck. QB2 se ubica en el norte de Chile y es uno de los yacimientos de cobre sin explotar más grandes del mundo. Cuando esté en funciones, la mina será un activo de clase mundial con bajos costos de operación y una vida útil inicial de 28 años con un importante potencial de crecimiento adicional. La operación de QB2 incorpora amplias medidas medioambientales que incluyen el uso de agua de mar desalada y un plan de manejo de relaves que maximiza la recuperación de agua en un terreno difícil.
Golder diseñó el depósito de relaves y está prestando los servicios de aseguramiento de calidad, o QA, de la construcción. Esta exigente tarea requirió varios diseños en profundidad y varios análisis para diseñar una instalación capaz de manejar 140 000 toneladas de relaves diarios que serán transportados por gravedad al depósito, donde se separarán en sus fracciones fina y gruesa. La fracción de arena gruesa se utilizará para construir el muro de contención, mientras que la fracción más fina se depositará en la cubeta.
«El manejo responsable de los relaves mineros es parte importante de nuestro negocio», explica Paul Bedell, Principal e Ingeniero Geotécnico Senior de Golder. «Es un verdadero honor tener la oportunidad de trabajar en un proyecto de alto perfil como este y aprovechar nuestras mejores prácticas en diversas disciplinas para diseñar esta instalación. Todo el equipo se toma esta responsabilidad muy en serio y todos estamos orgullosos de lo que se ha logrado: un diseño sólido para un depósito de relaves, en sintonía con el imperativo de la industria de garantizar la seguridad. Esto ha sido el resultado de la colaboración con nuestros clientes y entre nuestros equipos internos internacionales, en distintos entornos de trabajo y en varios idiomas».
Diseño de Golder
Además del diseño del muro del depósito, se prestaron los siguientes servicios: diseño del manejo de aguas superficiales, diseño de la clasificación del material de relaves (es decir, estación de ciclones) y diseño de conducciones para distribución de agua y relaves con componentes eléctrico, estructural y de instrumentación.
El depósito de relaves comenzará con un muro ataguía de enrocado de 35 m de altura y un muro de partida de enrocado de 120 m de altura, para luego levantarse el muro de arena de relaves durante toda la vida útil de la operación. Al final de la vida útil de la mina, que durará 25 años, el depósito de relaves tendrá una altura de 310 metros. El uso de arena cicloneada es una práctica común en Chile y ha demostrado ser un método seguro de construcción de estructuras a gran escala como las que se requieren en esta obra.
Se agrega agua para reducir el contenido de sólidos de los relaves para el ciclonaje que produce arena para la construcción del muro y lamas que se depositan en la cubeta. El complejo sistema de deposición y manejo de relaves maximiza el agua recuperada.
Gestión del proyecto y del cliente
El ciclo de vida del proyecto (prefactibilidad hasta la construcción) tuvo una duración de cinco años. Más de 400 colaboradores de Golder, procedentes de seis países, contribuyeron al proyecto y gran parte del trabajo se realizó en dos idiomas: un gran ejemplo de colaboración entre culturas y entornos de trabajo. Como en todo proyecto de esta duración y complejidad, hubo cambios de personal, y a lo largo de las etapas del proyecto se requirió de un canal de comunicación expedito y directo con el cliente y con los grupos de interés. Al inicio del proyecto se registraron las expectativas del cliente, que fueron sometidas a exigentes pruebas durante el desarrollo posterior. Era indispensable definir con claridad los cargos de responsabilidad del personal clave de Golder, como el gerente de proyecto, el gerente de ingeniería y los líderes técnicos, y que Golder, como equipo, estuviera en permanente evolución durante el transcurso del proyecto.
¿Qué sigue?
El trabajo para el proyecto QB2 que sigue en manos de Golder es el aseguramiento de la calidad de la construcción, o CQA. Se espera que la construcción dure aproximadamente tres años y el plan actual considera que la mina comience a operar en 2022.
Más información
Visite el sitio web público de QB2 para ver fotos e información general sobre el proyecto. Para obtener más información sobre la participación de Golder, comuníquese con Paul Bedell (Gerente de Ingeniería) o Jason Doyle (Gerente de Proyecto).